Olga Tañón presentó el viernes el primero de su serie de conciertos “Evolution Tour”, en el Coliseo Roberto Clemente. Olga Tañón no se impone límites a la hora de presentar un espectáculo. Su “Evolución Tour 2008”, que estrenó la noche del viernes en el Coliseo Roberto Clemente, era una propuesta sumamente ambiciosa que, aunque tuvo leves desaciertos, alcanzó su propósito de combinar un montaje pomposo y de alta calidad con un repertorio musical que resumiera sus 20 años de carrera.
De entrada, la colocación de la tarima en forma de X en el mismo centro de la sección de arena, con los músicos ubicados en sus extremos y público alrededor, era la confirmación de la promesa de Tañón de que el montaje sería diferente a lo antes visto en la Isla. Ciertamente, la distribución del espacio le dio un aire innovador al coliseo, pero también complicó los movimientos de la artista, quien tuvo que moverse continuamente para hacerse ver desde todos los ángulos del escenario.
A esto se sumó el hecho de que en cada cambio de vestuario, y fueron muchos, Olga tuvo que correr entre el público para llegar hasta su camerino escoltada por personal de la producción, lo que extendió las transiciones entre canción y canción. Leer Masss... / Click Aquí
